Material de Lectura

 

Poema jónico*


Aunque destrozamos sus estatuas,
aunque los sacamos de sus templos,
los dioses no murieron.

¡Oh tierra jónica!, aún te aman.
Es a ti a quien sus almas recuerdan,
y cuando te amanece la mañana de agosto,
tu aire toma vida de su fuerza.

Y a veces,
una sombra de efebo intangible, fugaz,
roza la cima de tus montes.

1911


* En la última corrección, este poema se llamó Recuerdo.